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Enrique Amarante Director de la Escuela de Fútbol Argentino www.elpotrero.com.ar

febrero 06, 2007

Triunfo espectacular del equipo de ABEL CORIA, sobre el de José Pintado


Cuando nadie lo suponía el equipo que dirige el coach titular de la ESCUELA DE FUTBOL ARGENTINO. www.elpotrero.com.ar ABEL CORIA, se impuso por goleada al dirigido
por José Pintado, UNION DE MAR DEL PLATA, campeón de esa importante
ciudad de Argentina. Recordemos que UNION, es un equipo casi privatizado
y entre sus notable tiene al coach argentino, JOSE PINTADO, es ayudante de campo
del Panadero DIAZ, cuando ambos dirigian RIVER PLATE de ARGENTINA

Tambien debemos testacar las hermosas camisetas que luce el CLUB RIVADAVIA,
con la leyenda de nuestra ESCUELA DE FUTBOL ARGENTINO
WWW.ELPOTRERO.COM.AR , son marca PUMA, asi como el resto de la
indumentaria.

Rivadavia hizo todo bien y elaboró una goleada estupenda

Le metió cinco a Unión de Mar del Plata con una extraordinaria actuación de Carlos Parisey

Pocas veces en este competitivo, duro y aguerrido Torneo Argentino, se puede asegurar a los 6 minutos del complemento que está el "partido definido". Y eso pasó anoche, cuando Rivadavia, en una actuación sin fisuras, le dio una paliza futbolística de proporciones nada menos que a Unión, último campeón marplatense, por un expresivo, merecido y elocuente 5 a 1.

El equipo de Abel Coria plasmó en la cancha un dispositivo táctico que rayó la perfección, pero además tuvo una enorme personalidad para dar vuelta un resultado, ya que se encontró perdiendo casi desde los vestuarios con un madrugador gol de Cuevas, que insinuaba que la noche no iba a ser de las más sencillas. Pero ...



El "as de espadas"

jugó para "once"

Podríamos decir que Carlos Parisey jugó anoche para el número de su camiseta. Tuvo, como siempre en el decano, la "once" en sus espaldas, y jugó un partido memorable. Fue el encargado de abrir y cerrar el partido, pero además hizo jugadas lujosas, no fue egoísta y terminó llevándose de regalo una merecidisíma ovación de su gente, que se quedó con las manos rojas de aplaudirlo durante los 90 minutos.

Pero anoche no fue "Carlín-dependiente" el albiazul, lo tuvo a Corbalán en una actuación consagratoria en el medio, Dindart y una jerarquía difícil de comparar en nuestro medio, Elía metido como si fuera la final del mundo, y arriba, Del Rosso, imparable y Fuhr, enamorado de la red rival, para completar una hora de juego sencillamente espectacular.



La virtud de reponerse

Cuando todavía se estaban acomodando en la cancha, la visita se puso en ventaja con un zapatazo de Cuevas que dejó sin reacción alguna a Armentía. Pero lejos de amedrentarse, esa conquista pareció un estímulo. Corbalán y Elía empujando desde el medio hasta hacerse patrones del mediojuego, llevaron a que primero Parisey le quemara las manos a Villar y luego un cabezazo del propio Elía exigió a fondo al golero visitante.

Estaba al caer el empate, y nació en una proyección de Martínez que Parisey en el punto del penal clavó abajo y junto a un palo de anticipo a sus cancerberos. El segundo, ya pasada la media hora, fue una joyita, con una gran arranque de Del Rosso, pase perfecto a "Carlín", y definición a lo Romario, con tres dedos, de puntín y rasante, ante la marca desesperada de dos zagueros. Comenzaba a gestarse otra historia



El goleador siempre está

En sólo 11 minutos del complemento Rivadavia selló una goleada impensada para muchos antes del partido. A los 3´ artesanal habilitación de Parisey a Fuhr, que definió como un gran goleador de raza. Ojos bien abiertos, mirando la posición del arquero y cruzándola al palo más lejano del arquero con más categoría que fuerza. Golazo.

Dos minutos más tarde, Parisey hizo pasar de largo a su marcador y su remate besó el palo, cuando si entraba era "para cerrar el estadio". Enseguida claro penal a Del Rosso, que Fuhr ejecutó en forma certera para decretar su "dopieta". Y el último, la "frutilla del postre" para verlo mañana por TSN en Pasión Deportiva, en una apilada de Parisey en el área, donde duele, llegar al fondo y devolverle gentilezas a Del Rosso, para que éste anotara a dos metros del arco.

Todo lo que pasó de ahí en más, y eso que faltaba media hora, estuvo de más. Unión era como esos boxeadores que pedían a gritos le tiraran la toalla, y Rivadavia, siempre estuvo muchísimo más cerca del sexto que de sufrir un circunstancial descuento. Esta veraniega noche de febrero, con mucho calor, seguramente quedará grabado en las retinas del hincha de Rivadavia, como el partido que le salieron todas las cosas bien y lo que es mucho más grato todavía, sin olvidarse de que enfrente estaba el último campeón de Mar del Plata. Hizo cinco, pudieron ser más y es más puntero que nunca con puntaje ideal en tres presentaciones

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